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martes, 17 de septiembre de 2019

El fénix de hielo

¡Bienvenidos una vez más a la Atalaya! Hoy, presentamos:


Ficha


Autor/a: Erya
Twitter: @eryaescribe
ISBN: 978-84-9477117-2-9
Tamaño: 110x180 mm.
Número de páginas: 87 páginas.


Sinópsis


Dicen que nada puede escapar de la guardiana. Es más rápida que el viento, más fuerte que un gigante, más fría que el corazón de un dioscuro.
«Yo soy el dioscuro del norte. Yo gobierno la ciudad de Ahtti y todo lo que la rodea, y nadie me va a arrebatar el poder.
Mi hermano ya me ha advertido sobre un grupo de incautos que se acerca a mis dominios con intenciones perversas, pero estoy preparado para ellos. La guardiana de Ahtti nunca me ha fallado. Tampoco lo hará esta vez. Ella los detendrá.
Y si tienen la fortuna de llegar hasta mí, mejor... Tengo una sorpresa para ellos».


Reseña


¡Estamos de vuelta en el mundo de Erya! De vuelta en sus misterios, sus personajes y sus paisajes. De vuelta a ese viaje que nuestros héroes emprendieron para descubrir el significado de las runas del mapa. 

Os avisamos desde ya, si no has leído «El pergamino de la reina», no sigas leyendo. ¡Que no, que no leas narices! En serio, no lo hagas..., que no..., lee la otra primero..., vale, avisado estás.

Este segundo tomo, segundo capítulo me atrevería a decir, se centra mucho más en las relaciones entre los personajes. 

Tenemos a una Erehna mucho más interesante, su personaje gana personalidad y protagonismo en esta parte. No quiero extenderme demasiado con ella pues tendría que destripar cosas del argumento, solo diré, que me encantó el modo en que Erya la trató y la construyó. Imposible no quererla.

Dedk es otro personaje que ha ganado muchos enteros en esta aventura. El personaje pega un giro muy interesante, que obviamente no diré, pero que a nadie puede dejar indiferente (y si te deja indiferente, de verdad, vuelve a leerlo porque no has cogido todo el fondo del asunto. No en serio, reléelo). Mi opinión sobre él ha cambiado radicalmente, dos veces. Si para bien o para mal es algo que cada uno de vosotros debe decidir. 

Oione, la pequeñaja que acompaña al resto del elenco por las tierras del continente de Anbes. En esta historia se mantiene casi en la oscuridad. Me hubiese gustado saber más cosas de ella y ahondar pero lo hace muy superficialmente, solo soltando zarcillos pero están ahí y la razón, estoy seguro, será revelada más adelante. Sigue hablando sola pero empiezo a pensar que..., en fin, Oione es muy agradable, a veces adorable y otras..., otras... A ver, alguien debería decirle a esta niña que hay cosas que no se tocan, ¿vale? ¡Porque se ve que nadie se lo dijo y luego pasa lo que pasa!

Fhiro. Si existe un personaje que atraiga más que Fhiro es Erehna, pero con el permiso de ella vamos a dejar a Fhiro como todo un imán. Sale poco, sí, poco. Me hubiese gustado que tuviese una parte sola para él, pero eso probablemente diese mucha más información sobre el personaje de lo que se quisiera. Aceptémoslo, a Erya no le gusta deshilar demasiado sus personajes con rapidez, si no dándonos únicamente pequeñas perlas de los mismos, pero sé que ella tiene una buena cantidad de notas sobre cómo son y, lo más importante, quiénes son. Esto queda muy claro en Fhiro y en su Oerara la lince que lo acompaña. Lo que nos cuenta Erya sobre Fhiro en este segundo capítulo tiene mucho que masticar. Personalmente me ha gustado mucho en relación a cierto evento que sucede hacia el final del relato. Ahí lo dejo.

Vamos, pues, ahora con un personaje que, si recordáis la anterior reseña, nos levantó tantas antipatías como Joffrey de GoT. Sí, hablamos del rey Cudrinn (¿no avisamos de que si no habíais leído la anterior no siguierais? Ahora no queremos quejas. ¡Chsssst! ¡Que no! Que avisamos arriba y está en negrita). A este personaje nos apetecía darle dos bofetadas a mano abierta pero bien dadas. Vale, pues resulta que empieza siendo exactamente igual de pedante y gilipollas y, entonces, en un momento determinado del relato y a punto de armar el brazo para ponerle la mejilla como un tomate..., ¡va Cudrinn y hace algo totalmente inesperado para él! Juaaaaas. Para que hablen de evolución de personajes. ¡Toma jeroma! (perdonad, uno que es de los ochenta). Un aplauso aquí pues veo a Cudrinn con otros ojos ahora. ¿Y vosotros? ¿También lo haréis? Dejadnos vuestra opinión en los comentarios pero recordad ser respetuosos, ¿vale? Es gratis.

Por supuesto, en este capítulo tenemos un nuevo personaje. Nuesenya se llama (si os cuesta pronunciarlo, tranquilos, no os pasa nada en la lengua, es que sois humanos). Pues Nuesenya se presenta en seguida como un personaje misterioso (sí, en los relatos de Erya todos los personajes son opacos y nada transparentes) y aunque muchos calaréis al personaje enseguida, os aseguro, que está muy bien construido. Para mí es el Gandalf de este relato. Vale, Gandalf es decir mucho, pero creedme, poco le falta. Y no, no es una maga ni nada parecido. Se presenta como una anciana, de aspecto frágil pero enseguida se convierte en un gran activo para el equipo. 

Pasando al tema de construcción de la historia, nos revelamos ante otro relato muy bien llevado. Fluido, fácil de leer y con esa batuta que Erya esgrime cuando tiene a sus personajes construyendo la historia. Es algo que, aquí en la Atalaya, admiramos. La historia no lleva a los personajes por diferentes eventos si no que son ellos, quienes con sus decisiones y personalidades, van construyendo los diferentes eventos. Por otro lado, aquí tenemos otra «roadbook» si me permitís el término. Casi toda la historia se basa en ir del punto B al punto C haciendo mucho hincapié en los eventos que suceden durante el viaje. Gracias a eso, los personajes van creciendo y volviéndose mucho más tridimensionales. 

Tenemos antagonistas en esta aventura. Algunos totalmente secundarios pero otros principales. No puedo hablaros de ellos u os destriparía parte de la trama. Quiero hacer mención, no obstante, a uno en particular: Garrock. Atentos a este personaje que dará qué hablar. Si esperabais que el antagonista principal fuera el dioscuro del norte, me temo, que os equivocáis de medio a medio. Os hablaré, no obstante, de Garrock.

Garrock es un comerciante de Calanna, ciudad a la que hay que echar de comer a parte. Este comerciante tiene una forma muy curiosa de hacer negocios pero Erya no deja pasar la oportunidad de lanzarnos un mensaje muy claro con él. Es rudo, terco, peligroso como no podéis imaginar y, lo que lo hace más peligroso si cabe, es que es astuto. No es el clásico antagonista que está ahí para que los héroes le despachen en combate singular, no. Está por otras razones. ¿Qué razones? Ah, buena pregunta.

Como ya sabéis, no hacemos spoilers y en esta historia hay muchos, por lo que no puedo contaros más sin revelar detalles de la trama. Hacerlo sería un crimen y quiero conservar mis brazos.  Hablando de brazos, no os perdáis el homenaje que Erya se marca al clásico Aladdin (la de animación). Encantador.

No tendremos muchas escenas de acción en esta aventura y, las pocas que hay, me resultaron insignificantes. No hace avanzar la historia metiendo escenas de acción pero «El fénix de hielo» no las necesita. Hay mucho que contar y poco tiempo para andar sacando la espada, aunque no por ello no tengamos alguna que otra dosis, pero ya os digo, no esperéis combates épicos esta vez. No los hay. 





Opinión personal


¿Sabéis esa sensación que os queda al final de una temporada de una serie televisiva que os gusta mucho pero os deja con un hype enorme? ¿Que solo podéis soltar un ¡la madre que los parió!? Pues así nos quedamos en la Atalaya. ¡La madre que parió a Erya! En el primer libro ya había dejado claro que era una maestra en el arte de dejar con la miel en los labios al lector y hacerle desear más, pero jolín, aquí sube aún más de nivel.

No es necesario decir que esta nueva entrega nos ha enganchado tanto, o más, que la otra y encima no nos ha defraudado nada. Quiero mencionar que también da para debates la historia. Me imagino en un bar, alrededor de unas bebidas fías, tortilla de patata (¿qué pasa? Me gusta la tortilla de patata) mientras se debaten pasajes y decisiones de los personajes. Sí, ¡una historia de ochenta y siete páginas da para un buen rato de discusiones frikis! Si eso no os hace sacar una sonrisa quizá deberíais volver a Crepúsculo (es broma, leed lo que queráis. ¬¬).

Y hasta aquí esta entrada.

¡Leed mucho!

Valoración

(Y seguimos sin mapa)




2 comentarios:

  1. Ay, madre jajaj en serio, me declaro fan de estas reseñas 😂😂 Me encantan 😍 Muchas gracias por la dedicación en hacerlas, se nota el esmero que ponéis en ellas 🥰 Y gracias por leerme 😍 a ver qué tal la siguiente parte... Chan Chan.... 🙈

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    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu comentario, nos encanta que te encante. Gracias a ti por escribir esta gran historia, ya hemos empezado el siguiente libro. Estamos que nos mordemos las uñas.

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